¿Dónde está mi dije? ¿Lo extravié o fue robado?
18 de marzo de 2015, 15:46 p.m. EET, Herzliyya, Israel
"¿Dónde está mi dije? ¿Lo extravié o fue robado?"
Después de haber buscado sin éxito su dije de cuarzo rosa, esta clienta comenzó a preguntarse si simplemente lo había extraviado, o si la señora que hace el aseo en su casa lo había robado. Su pregunta fue: ¿Dónde está mi dije? ¿Lo extravié o la señora que hace el aseo lo robó?
En este carta el significador del dije es Mercurio, y el significador de la aseadora es Saturno. Mercurio se separó recientemente de aspecto con Saturno, lo cual podría ser testimonio de robo. Sin embargo, si el dije hubiese sido robado por la empleada, lo más probable es que en la carta hubiéramos encontrado a Mercurio justo adentro de la sexta casa: el dije en la casa de la empleada. Pero no lo está.
Si la clienta dejó el dije en un lugar diferente al que siempre lo deja, ¿dónde está?
Mercurio está en un lugar de la carta que representa su dormitorio y/o el lugar de su marido en el hogar. Mercurio también está en el signo de agua de Piscis, lo cual es un testimonio de que el dije está con algo relacionado con el agua, y en conjunción con Neptuno, el cual representa las turbulentas aguas del océano. El estar en Piscis muestra que el dije está probablement dentro de algo, ya sea un cajón, una caja, una bolsa, etc.
¿La consultante lo encontrará?
En esta carta, Mercurio es también el significador del consultante. Sin embargo, debido a que éste ya está ocupado haciendo el rol de significador del pendiente, podemos tomar a la Luna como significadora de la consultante. La Luna está aplicando para hacer un aspecto con Mercurio, reuniendo a la clienta con su dije. Pero antes de que esto suceda, la Luna se topa con Saturno. La única manera de que la clienta pueda encontrar el dije, es eliminando la prohibición hecha por Saturno.
Que pasó?
Le dije a la consultante que la señora del aseo no robó el dije, y le sugirí hablar con ella de una manera muy diplomática y preguntarle si por casualidad lo había puesto en otro lugar en la casa.
Después de que la clienta recibió mi respuesta, decidió buscar una vez más antes de hablar con su empleada. La consultante encontró el dije en su dormitorio, dentro de una pequeña bolsa que siempre lleva a la playa.
El dije sólo pudo ser encontrado una vez la consultante removió la prohibición de Saturno: la idea de que la señora que hace el aseo lo había tomado le impedía buscarlo mejor ella misma.